abril 12, 2011

El placer de mi dolor


¿Qué puedo decir cuando ya esta todo dicho?
El pájaro vuela a su nido buscando cariño, yo corro buscándote a ti.
En esa búsqueda me encuentro sólo,
Queriendo ser yo mismo e intentando no dañar tu alma.
Pero ahí estas tu, hiriéndome sin darte cuenta y yo convirtiendo esas heridas en placer,
Tan solo por el hecho de que provienen de ti y
Tan solo porque no estoy contigo.

Cae la lluvia y con ella mis ganas de seguir.
Que distinta sería la vida si te tuviera a mi lado,
Porque después de todo tu eres mi vida
y sin ti solo vuelvo a la triste rutina de buscarte día a día,
sabiendo que te tengo, pero que aún no logro encontrarte.

“¡No te hagas la sorda!” Mi interior le reclama,
“¡No te hagas el mudo!” responde el corazón.
Pero, ¿Qué puedo decir cuando aún no he dicho nada?
Lo sé bien, eres demasiado para mi,
Pero al menos déjame sentir el dolor de tu partida,
Porque estoy seguro que eso sí lo merezco.





No hay comentarios:

Publicar un comentario